Siempre me salvaste
http://www.elsenordelosbombillos.com/
Pude haber sido un borracho; y no lo aceptaste.
Pude haber sido un drogadicto; y no lo aceptaste.
Pude haber sido un fumador empedernido; y no lo aceptaste.
Pudo haber sido un libidinoso lujurioso y amante del placer; y no lo aceptaste.
Pude haber sido un neurótico; y no lo aceptaste.
Pude haber sido un solitario; y no lo aceptaste.
Pude haber sido un impaciente; y no lo aceptaste.
Pude haber sido un incrédulo y perezoso; y no la aceptaste
Pude haber sido un mentiroso; y no lo aceptaste.
Pude haber muerto en aquel derrumbe, en aquel barranco, en aquel automóvil, en aquella quebrada, en quel río, en el mar; en aquella bomba; y no lo aceptaste.
Siempre, siempre me salvaste.
Gracias Jesús: Carlos Eduardo Llano Jaimes.
Pude haber sido un borracho; y no lo aceptaste.
Pude haber sido un drogadicto; y no lo aceptaste.
Pude haber sido un fumador empedernido; y no lo aceptaste.
Pudo haber sido un libidinoso lujurioso y amante del placer; y no lo aceptaste.
Pude haber sido un neurótico; y no lo aceptaste.
Pude haber sido un solitario; y no lo aceptaste.
Pude haber sido un impaciente; y no lo aceptaste.
Pude haber sido un incrédulo y perezoso; y no la aceptaste
Pude haber sido un mentiroso; y no lo aceptaste.
Pude haber muerto en aquel derrumbe, en aquel barranco, en aquel automóvil, en aquella quebrada, en quel río, en el mar; en aquella bomba; y no lo aceptaste.
Siempre, siempre me salvaste.
Gracias Jesús: Carlos Eduardo Llano Jaimes.
Comentarios